El colágeno es una proteína de las más importantes para el cuerpo humano, constituye el 75 % del peso seco de la piel, y de él depende que la piel se mantenga tersa, elástica y luminosa.
A partir de los 25-30 años, la producción de colágeno se disminuye en un 1% anual.
Una piel con falta de colágeno presenta flacidez, arrugas y pérdida de volumen.
Las zonas más visibles son: pómulos, mandíbula, cuello y escote.
Es importante realizar una medicina preventiva con el fin de retrasar al máximo los signos de envejecimiento y conseguir un envejecimiento que sea más armónico y natural.
El tratamiento ideal es el uso de “Inductores de Colágeno”. Los inductores de colágeno estimulan a los fibroblastos para producir colágeno y elastina.
Hoy contamos con distintos inductores de colágeno, unos químicos y otros físicos.
inductores de colágeno químicos
- Ácido Poliláctico
- Hidroxiapatita
- Policaprolactona
Estas moléculas actúan mediante mecanismo de acción inflamatorio. Es decir, se experimenta una inflamación y los fibroblastos reaccionan generando mayor producción de Colágeno tipo I de carácter fibrótico, excepto con la Policaprolactona, que estimula Colágeno de tipo I pero no fibrótico.
inductores de colágeno FÍSICOS
- Radiofrecuencia
- Láser
- Microagujas, etc.
La radiofrecuencia y el láser funcionan produciendo un incremento de temperatura que estimula al fibroblasto a producir más colágeno y las microagujas activan produciendo una lesión directa sobre el fibroblasto, y este, reacciona generando también un colágeno tipo I fibrótico.
¿BUSCAS UN INDUCTOR DE COLÁGENO BIOLÓGICO, seguro Y NOVEDOSO?
Nosotros aconsejamos el uso de un inductor de última generación que se llama Karisma.
Este producto es un híbrido que contiene en su composición: 400 mg de Ácido Hialurónico de alto peso molecular, 200 mg de la cadena alfa 1 de colágeno recombinante y una cantidad de Carboximetilcelulosa.
En esta fórmula, el Ácido Hialurónico aporta una profunda hidratación y crea el ambiente necesario para que la cadena alfa 1, que es la inductora de colágeno, ejerza su función y estimule al fibroblasto a poner en marcha el “mecanismo natural/biológico” para generar más colágeno y elastina.
El mecanismo de acción es NO inflamatorio y se genera colágeno tipo I no fibrótico. Es decir, el producto no se comporta como cuerpo extraño y no deja huella estética.
conclusión
La conclusión a esta reflexión es que usar el inductor de colágeno Karisma es invertir en una medicina preventiva que retrasará los síntomas de envejecimiento y conseguirá un envejecimiento más armónico y natural.
